domingo, 6 de abril de 2014

Violencia en los estadios


Estadios

Hace unos días se hizo muy sonada una noticia sobre los estadios de fútbol, de la liga mexicana. Me gustaría hablar de esto, y empezaré con una especie de conclusión, quizás es lo que todos los medios de comunicación, y el 'sentido común' al oír sobre ese tipo de enfrentamientos entre aficionados, es lo que dicen. ¿Qué es lo que dicen? Que es un lugar donde va la gente a divertirse, donde los niños van a ver a sus jugadores favoritos, donde las parejas asisten para reír un rato entre apuestas y goles. Supongo que todos estamos de acuerdo con esto, no hay porqué ser violentos en el momento de apoyar al equipo que sea, no somos animales, aunque esas personas nos ayudan bastante a no olvidarnos que sí lo somos en cierto sentido, o en muchos sentidos. Pero, lejos de ese tema, vamos al estadio a gastar dinero, reír, llorar -en el caso de los apasionados- y básicamente mirar un espectáculo.
  Hace unas tres semanas asistí a un partido -del equipo al que he apoyado desde pequeño, Cruz Azul-. Nunca había asistido a un partido profesional. Cuando llegué, el escenario me pareció bastante familiar, "es como un concierto", pensé. Pienso que tengo razón por varias cosas -en mi analogía-, en un concierto todos van de un cierto color -en especial si es concierto de rock, el color negro manda-, en el partido, sencillamente hay un uniforme. La gente en el estadio escucha el nombre de 'x' jugador y comienzan las ovaciones, en un concierto también. Cuando 'x' equipo anota, la gente grita, en un concierto suena el intro de 'x' canción y la gente se emociona. En fin, quiero decir que la gente deja de ser razonable -si es que en momentos lo es- cuando va a un espectáculo, pienso que esto es el factor principal de la facilidad por la que la gente -alguna gente- pierde la 'cordura' -, por usar una frase que creo la mayoría entendemos, vagamente-. No exagero, al partido que asistí había un defensa del equipo contrario que el el color de su piel era 'negra'. Cuando cometía algún error ese defensa, se oían claramente los gritos como de "¡Pinche negro pendejo!", creo que esa ofensa es común incluso con los jugadores que eran "güeros", pero lo que quiero decir, es que en ese caso particular de los jugadores de piel 'de color' -como se les dice usualmente-, las ofensas pueden ser comunes como lo son con otros jugadores, pero la línea es delgada cuando las ofensas adquieren otros matices, llegando al racismo. Pienso que la línea es delgada porque quienes han asistido a un partido sabrán que los insultos a veces causan risa, sin embargo, en ocasiones al ser muy repetitivo, comienzan a generar otro tipo de emociones en la gente. Esto va más relacionado con el tema del racismo, que es de lo más bajo que puede hacer un hombre, supongo que hay otras cosas igual o peor de 'bajas', de esas que nos hacen dudar -al menos a mí me hace dudar- sobre la igual dignidad de los hombres.
  El caso de la violencia entre aficionados, tiene matices diferentes, pero el conjunto de seres que participan en esos actos, es el mismo que el de los que gustan de ofender a jugadores por su "raza", como si existieran las razas humanas. Ese conjunto es el que hace dudar sobre la igualdad de dignidad de hombres, aquellos que son más animales que nosotros, que no soportan ver que su equipo pierde, que el delantero rival finje una falta -aunque debo admitir que eso es molesto en ocasiones, pero hay que entender que es un espectáculo-, en una sola palabra, aquellos que no son razonables. Son las bestias. He pensado que debemos "agradecer" la existencia de esos sujetos, ¿por qué? Porque quizás así la gente rememore que somos animales, que las emociones están ahí, acechándonos, esperando un mometo de debilidad para que actuemos según ellas dictan. Ellos son el vivo ejemplo de esto, cualquier hombre razonable no golpearía a otro hombre solamente porque no comparten el gusto por un equipo, menos porque el equipo del otro va ganando. Leí que en esa situación del partido entre equipos de liga mexicana, la agresión fue porque los policías agredieron... Vaya pretexto ridículo. Con esto no estoy negando que la policía pueda tener algo de culpa', es ridículo porque la causa es la misma, se dejan llevar por sus emociones, como animales. Es decir, que ya nadie puede decirles algo o incluso mirarlos porque se sentirán ofendidos, entonces no son siquiera capaces de ignorar y seguir con su fiesta, dándole apoyo al equipo, cantando las porras, etc. En una sola palabra, son unos débiles de voluntad y nunca se han puesto a pensar sobre cómo reaccionar ante acciones que afecte su bienestar, han estado desperdiciando lo que llaman vida, no piensan. Y es desperdiciar porque es lo propio del hombre, pensar. Ojalá si alguien lee esto, no se ofenda por las críticas 'fuertes', tampoco que pienso que estoy ofendiendo, pienso que es sencillo de entender la diferencia entre animal racional -y agregaría razonable para que sea aún más fuerte la diferencia- y animal. No estoy negando que en cualquier momento todos entramos en el terreno de la emoción, no estoy afirmando -absolutamente- que todos los que asisten a los estadios son así. Básicamente pretendo decir que existen seres así, que ojalá entendieran que nunca van a ganar algo tangible con esas acciones.

M. Téllez.

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